El banco Credit Suisse, con sede principal en la ciudad de Zúrich,
Suiza, estima que alrededor del mundo hay una población de 33 millones
de millonarios. Pero sólo un grupo se distingue de este ya afortunado
estrato social: el término de moda para calificar a los muy ricos de los
ricos es el de los "pentamillonarios". Una categoría concebida en
Estados Unidos que engloba al millón de personas que disponen de activos personales superiores a los USD cinco millones libres para invertir. Es el surgimiento de una tendencia que devela una realidad: cada vez más dinero se concentra en menos manos.
Según un estudio de la firma consultora Boston Consulting Group (BCG),
el sentido de exclusividad y pertenencia al selecto club de millonarios
se ha erosionado, ha perdido valor a medida que fue incrementándose su
población. La investigación considera que sólo en territorio
estadounidense, hay seis millones de personas con activos superiores a
USD 1 millón. En China: 1,3 millones de millonarios. En el Reino Unido,
de acuerdo a información del banco Barclays, uno de cada 65 adultos
dispone de bienes que exceden el millón de libras esterlinas -más de USD
1,3 millones-, un conglomerado de casi 715 mil ciudadanos. Más los
nuevos ricos de muchas naciones emergentes, la expansión de esta
comunidad le quita su criterio de exclusividad.
Los "pentamillonarios" nacen para recobrar el condimento de excepcionalidad:
un concepto que desnuda aún más la nula redistribución de la riqueza,
las distancia entre escalas sociales en calidad global, a niveles
exponenciales. La lucha de clases es una victoria inapelable de los
ricos, quienes acumulan más dinero que el 99% restante de la población
mundial.
El estudio del BCG anuncia que es la primera vez en la historia que se llegan a registrar que un millón de personas atesoran cinco millones de dólares cada uno
y que con periodicidad anual la cantidad de multimillonarios aumenta un
5% únicamente en Estados Unidos. Esta cantidad representa apenas uno entre 320 compatriotas. Se trata de una categoría en franco crecimiento en algunas de las mayores economías del mundo.
Hay fondos de inversión reservados para aquellos que tienen al menos cinco millones de dólares
Los expertos explicaron el porqué de los cinco millones y su asimilación al nombre de "pentamillonarios": estiman que es la cifra para vivir despreocupado de la supervivencia financiera.
Aunque, a la vez, admiten la relatividad de ese monto: dependerá en
última instancia de sus hábitos y patrones de consumo, más hipotéticos
ahorros.
Personas con extensa potencialidad de recursos repercutirán,
inevitablemente, en ciertos segmentos del mercado. Como reflejo a estas
conductas ostentosas, resta advertir la dinámica financiera de los
compañías que ofrecen servicios e instrumentos de lujo máximo. La
contabilidad de Rolls Royce, célebre fabricante automotriz de
sofisticados y fastuosos modelos, presume de cuatro mil ventas anuales,
un promedio comercial que nunca antes había alcanzado en su trayectoria
empresaria. La edificación de edificios con departamentos de ultralujo
en las grandes ciudades de Europa, Asia y América simulan el impacto de
esta nueva raza de ricos sin límites de gasto.
Estados Unidos tiene, en definitiva, más de un millón de
pentamillonarios, ricos con activos invertibles que superan los USD
cinco millones. La naturaleza de esta estadística cría la aparición de
una clase social de personas que pueden consumir sin restricciones ni
preocupaciones. Es además de una moda, un fenómeno sociopolítico que
revela las miserias y la desidia del mundo moderno, en el que viven -sin escrúpulos- 33 millones de millonarios en una población 224 veces más amplia.
No hay comentarios: