Pershing Square Capital Management ganó en marzo 2.600 millones al salir de sus coberturas
Su nombre es Bill Ackman y es uno de los gestores más reconocidos del mundo. De hecho, se le puede encontrar en muchas ocasiones en las cadenas televisivas norteamericanas hablando sobre finanzas. Todo ello, gracias a que es especialmente hábil es una actividad muy apreciada por la gente: ganar dinero, mucho dinero, invirtiendo en Bolsa.
A principios de marzo, cuando la crisis del coronavirus acechaba con fuerza pero aún no había tocado su pico, el famoso gestor estadounidense William ‘Bill’ Ackman, del ‘hedge fund’ Pershing Square Capital Management, se debatía entre liquidar al completo la cartera del fondo para protegerse del Covid-19 o hacer una serie de coberturas sobre activos de crédito corporativo para así ganar con posibles caídas del mercado. Optó por la segunda y su fondo se ha disparado.
La última proeza de Ackman ya está recorriendo el mundo, después de multiplicar por 100 su última inversión. Y en apenas 15 días, todo ello gracias al coronavirus. Así, el gestor apostó 27 millones de dólares, algo menos de 25 millones de euros, el pasado 3 de marzo a que el mercado de acciones de Estados Unidos se hundía. Una profecía que se cumplió al píe de la letra cuando la principal Bolsa de EEUU, el S&P 500, se precipitó entre ese día y el 23 de marzo, momento que ejecutó la venta, casi un 26%. El resultado es que retiró su apuesta con un saldo ganador de 2.600 millones de dólares, unos 2.360 millones.
La
clave del movimiento del gestor empezó en el momento en el que analizó
el efecto que había tenido el coronavirus sobre China. Un ejercicio que
debían haber realizado muchos Gobiernos. Nunca se creyó las cifras
oficiales que aportó China, ni en el número de infectados ni en el
número de muertos, y se centró en otros datos más económicos. Uno de
ellos, el denominado PMI manufacturero o indicador de actividad
industrial. Ackman descubrió que había caído súbitamente, es decir, que
obligó a un parón general (no parcial como decía el Gobierno comunista
chino) de su economía.
Una
vez todo encajaba, articuló lo que se conoce como credit protection que
son opciones derivadas ligadas a la percepción sobre la solvencia de
las empresas a la hora de pagar sus deudas. En otras palabras, apostó
directamente a que esas compañías tendrían muchos problemas en el corto
plazo. ¿Cómo se hace eso? A través de lo que se conoce como seguros
contra impagos, Credit Default Swaps, que se utilizan para asegurarse
frente a la quiebra de las compañías. El gestor los compró a un precio
muy pequeño, había muy poca demanda porque nadie pensaba que habría
problema, y una vez que su precio se disparó los vendió.
Así, pudo transformar 27 millones de dólares en más de 2.600 millones. Aunque, él mismo reconoce que no fue todo intuición, también hubo algo de suerte. Puesto que esa posición se abrió con la intención de cubrirse frente a una caída de las acciones de algunas de sus empresas. La explicación es que si el mercado cae, tus títulos valen menos, pero puedes sacar rentabilidad a los CDS que tienes en cartera, con lo que puedes cubrir posiciones. Aún así, fue una ingeniosa táctica que no muchos más gestores siguieron.
Ackman
también es famoso por sus métodos. Por ejemplo, nunca pide el
currículum en sus entrevistas de trabajo. Para él, lo más importante es
el potencial y son conocidas varias anécdotas suyas de contratar, por
mucho dinero, a trabajadores sin estudios que le impresionaron. Es el
caso de un guía de pesca al que fichó, tras una excursión por un río.
El gestor americano ha reutilizado esas ganancias en incrementar sus posiciones en Agilent, Berkshire Hathaway, Hilton, Lowe’s y Restaurant Brands. Asimismo, ha puesto un pie en Starbucks. Además, ha incrementado la liquidez de un 14% a un 18%, según Bloomberg.
Su nombre es Bill Ackman y es uno de los gestores más reconocidos del mundo. De hecho, se le puede encontrar en muchas ocasiones en las cadenas televisivas norteamericanas hablando sobre finanzas. Todo ello, gracias a que es especialmente hábil es una actividad muy apreciada por la gente: ganar dinero, mucho dinero, invirtiendo en Bolsa.
A principios de marzo, cuando la crisis del coronavirus acechaba con fuerza pero aún no había tocado su pico, el famoso gestor estadounidense William ‘Bill’ Ackman, del ‘hedge fund’ Pershing Square Capital Management, se debatía entre liquidar al completo la cartera del fondo para protegerse del Covid-19 o hacer una serie de coberturas sobre activos de crédito corporativo para así ganar con posibles caídas del mercado. Optó por la segunda y su fondo se ha disparado.
La última proeza de Ackman ya está recorriendo el mundo, después de multiplicar por 100 su última inversión. Y en apenas 15 días, todo ello gracias al coronavirus. Así, el gestor apostó 27 millones de dólares, algo menos de 25 millones de euros, el pasado 3 de marzo a que el mercado de acciones de Estados Unidos se hundía. Una profecía que se cumplió al píe de la letra cuando la principal Bolsa de EEUU, el S&P 500, se precipitó entre ese día y el 23 de marzo, momento que ejecutó la venta, casi un 26%. El resultado es que retiró su apuesta con un saldo ganador de 2.600 millones de dólares, unos 2.360 millones.
¿CÓMO ARTICULÓ LA OPERACIÓN ACKMAN?
Una vez descubrió que el virus acabaría obligando a parar la economía se centro en las empresas con problemas de deuda. Al fin y al cabo, son éstas las primeras en declararse en bancarrota cuando los ingresos caen con fuerza. Además, antes del coronavirus cotizaban a precios muy bajos, por la gran cantidad de líquidez en el mercado, lo que aumento todavía más su rentabilidad. Así, Ackman intuyó el potente shock económico que se produciría y dirigió su apuesta al eslabón más débil de la cadena: los bonos de las compañías menos solventes, conocidas como high yield.Así, pudo transformar 27 millones de dólares en más de 2.600 millones. Aunque, él mismo reconoce que no fue todo intuición, también hubo algo de suerte. Puesto que esa posición se abrió con la intención de cubrirse frente a una caída de las acciones de algunas de sus empresas. La explicación es que si el mercado cae, tus títulos valen menos, pero puedes sacar rentabilidad a los CDS que tienes en cartera, con lo que puedes cubrir posiciones. Aún así, fue una ingeniosa táctica que no muchos más gestores siguieron.
UNA DE LAS PERSONALIDADES DE WALL STREET
Alto, guapo, atractivo, filántropo y con un sueldo de infarto. Ackman es una de las personalidades de Wall Street y durante muchos años fue una referencia. Sus arriesgadas inversiones le han granjeado una fama que despegó allá por 2013. Ahora, su nombre luce entre los de los mejores gestores del mundo junto a Kenneth Griffin, de Citadel, Raymond Dalio o David Tepper. Todos ellos, pese a que sus salarios son variables por los objetivos, se embolsan de media más de 1.000 millones de euros al año. Nada mal.El gestor americano ha reutilizado esas ganancias en incrementar sus posiciones en Agilent, Berkshire Hathaway, Hilton, Lowe’s y Restaurant Brands. Asimismo, ha puesto un pie en Starbucks. Además, ha incrementado la liquidez de un 14% a un 18%, según Bloomberg.
Aristóteles: «La habilidad de exponer una idea es tan importante como la idea en si misma» Esperamos que te haya gustado " Aristóteles: «La habilidad de exponer una idea es tan importante como la idea en si misma» ".
ResponderEliminar"Si quieres conseguir algo grande, para de pedir permiso".
ResponderEliminarEl secreto de una vida exitosa es encontrar cuál es tu destino y entonces perseguirlo (Henry Ford)
ResponderEliminarPara Ford esa era una máxima muy importante a incorporar en nuestra filosofía de vida.
Solo cuando la oruga creyó que el mundo terminaba se transformó en mariposa (Proverbio)
El secreto de una vida exitosa es encontrar cuál es tu destino y entonces perseguirlo (Henry Ford)
ResponderEliminarPara Ford esa era una máxima muy importante a incorporar en nuestra filosofía de vida.
Solo cuando la oruga creyó que el mundo terminaba se transformó en mariposa (Proverbio)
Por culpa de un clavo, se pierde la herradura,
ResponderEliminarPor culpa de la herradura se pierde el caballo,
Por culpa del caballo, se pierde el jinete,
Por culpa del jinete, se pierde el mensaje,
Por culpa del mensaje, se pierde la batalla,
Por culpa de la batalla, se pierde el Reino,
por culpa del Reino, se pierde la vida,
por culpa de la vida
Sin CRISTO, se va al infierno
"Cristo viene"
Espere a que aparezcan las señales de "en venta". Cada mercado bajista es diferente; nadie puede predecir cuánto durará este o hasta dónde llegará. Aunque los inversores desean desesperadamente que el mercado bajista termine rápidamente, se requiere paciencia y una cabeza fría.
ResponderEliminarA juzgar por los mercados bajistas anteriores, todavía estamos en las primeras etapas de un ciclo largo con muchos giros y vueltas.
ResponderEliminarUna cosa es lo que se dice y otra cosa es lo que demuestran los números. Podemos vivir siempre en el país de las fantasías y comer ilusiones, pero eso nunca termina bien.
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